La isla constituye un lugar de trabajo cómodo, organizado y agradable, en el que todo se encuentra accesible sin apenas necesidad de desplazamientos.
El blanco sigue siendo un color estrella en las cocinas actuales. Transmite sensación de limpieza, multiplica la luz y admite complementos en cualquier tono. ¿Una apuesta moderna? Introducir un toque en un color atrevido (lila, naranja, verde, fresa) que dé carácter y vitalidad al ambiente para evitar que la cocina parezca aburrida. Esta cocina se caracteriza por la serenidad y el equilibrio que transmite, a partir de puertas lisas, sin adornos, con los tiradores ocultos que favorecen la uniformidad de la isla.la isla reúne, de manera organizada y en un espacio reducido, las zonas de lavado, cocción, almacenaje y comedor.
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